Una eterna cola de inmigrantes rodea desde hace una semana la Oficina de Extranjería de la calle Marruecos. Políticos inconscientes y agentes civiles de toxicidad se apresuraron a lanzar mensajes incendiarios, carentes de rigor y objetividad, en las redes sociales en las que vinculaban el colapso de la administración de trámites foráneos con el Ingreso Mínimo Vital o bien la regularización prevista por el Gobierno para los jóvenes agricultores de entre dieciocho y veintiuno años que estrenan contrato y buscan residencia en la provincia. Pero solamente lejos de la realidad. La fila de extranjeros responde al atasco que ha provocado la falta de atención presencial a lo largo de los dos últimos meses y medio, como a las reestructuración de un servicio que acostumbra a atender a quinientos de personas al día por las medidas de prevención del coronavirus y la limitación de movimientos de un colectivo de personas que representa al veinte por ciento de la población almeriense.
Javier Durán Ruiz, director de la Oficina de Extranjería, explica que a lo largo del estado de alarma han realizado todos y cada uno de los trámites de su cartera de servicios gracias al registro electrónico y sistema Mercurio, para el que se requiere certificado digital, con una media de resoluciones de entre mil quinientos y 2.000 expedientes al mes, aunque una proporción notable de usuarios habituales, de múltiples nacionalidades, han aguardado a la reapertura presencial para la presentación de peticiones. En este sentido, explica que “había pendientes de recogida más de 2.000 Tarjetas de Identidad de Extranjero (TIE)”, el documento único y exclusivo en nuestro país para acreditar una situación de permanencia legal.
Un retén de guarda permaneció en la oficina que estaba cerrada al público salvo en salvedades como las víctimas de violencia de género y los permisos de vivienda y trabajo a médicos extranjeros
Hasta hace una semana solo se han atendido en la oficina, en la que siempre y en todo momento había un retén de guardia, casos de emergencia como el previsto para las víctimas de violencia sexista y también el procedimiento preferente para los sanitarios de otros países que requerían autorizaciones para el desempeño de su trabajo en la provincia a lo largo de la pandemia. Se han dado dos solicitudes de renovación de vivienda para profesionales en el centro de salud de La Inmaculada en Huércal-Overa. El resto de demandas se solucionaron de forma telemática gracias a la flexibilidad de los técnicos de la oficina con el teletrabajo desde casa. Son cincuenta y siete funcionarios de la Subdelegación del Gobierno de Almería y otros doce agentes de la Policía Nacional que volvieron a finales de mayo a su puesto, mas con cambios substanciales tanto en la organización de la plantilla como en la estructura física de las instalaciones.
El director especifica que se ha reformado el interior de la oficina atendiendo siempre las recomendaciones de prevención de contagios de las autoridades sanitarias, con más separación de las mesas, elementos y materiales de protección como mamparas y reducción del aforo en la sala de espera menos de una tercera parte de su capacidad. Y sólo se atiende con cita previa y la programación se abre para 15 días, mientras que se sostiene el estado de alarma, por lo que se agotan las plazas inmediatamente. Esta modificación de la organización y fisonomía está detrás de las largas colas cada día de un centro por el que pasan más de ciento treinta inmigrantes al año y nada debe ver con la nueva prestación del Ingreso Mínimo Vital ni tampoco el permiso de trabajo para los inmigrantes de entre dieciocho y 21 años que se estrenan en el campo.
Ese procedimiento ha funcionado en provincias que trabajan por campañas como con la fresa de Huelva, en Almería no ha habido falta mano de obra agrícola y los trabajadores son los mismos de todo el año”. Los jóvenes que se han beneficiado de la medida para reclutar temporeros en base al real decreto del siete de abril no llegan ni al centenar y el plazo se cierra el 30 de junio. La iniciativa extraordinaria concede permiso de vivienda y trabajo durante dos años renovables a otros dos. En lo que se refiere al Ingreso Mínimo Vital, desde Extranjería desean dejar constancia que la petición es ajena a su competencia pues implica, entre otros muchos requisitos, un año de vivienda legal. cita huellas nie /p>
Durante los últimos días se han resuelto dudas de interesados, mas no es ni muchísimo menos una petición en la que interfieran los técnicos de su departamento. Las gestiones más habituales estos días son la de la entrega del TIE, la huella de esa tarjeta, las demandas para la renovación tanto del permiso de residencia como de trabajo y las solicitudes de arraigo para los que están en situación irregular. El certificado electrónico se ha transformado en un aliado indispensable a lo largo del confinamiento y asimismo las gestorías, asesorías y bufetes de abogados que realizan estos trámites con inmigrantes y con los que han mantenido contacto permanente sobre los diferentes canales de comunicación.
Otro de sus apoyos han sido los colectivos y asociaciones de extranjeros y los servicios municipales de los ayuntamientos de la provincia. La cifra de consultas y solicitudes al correo electrónico de la oficina se han multiplicado a lo largo de las 2 primeras fases de crisis sanitaria en las que las persianas de la calle Marruecos han permanecido a media altura. A partir de ahora se irán ampliando las citas al día para reducir la demanda, pero no será posible por el momento, por las restricciones de las medidas para la prevención de contagios de la COVID-diecinueve, alcanzar el cupo del quinientos de usuarios de los meses anteriores al estallido de la pandemia. El censo de población extranjera en la provincia supera los ciento cuarenta y cinco mil, uno de cada cinco habitantes en los ciento tres municipios.